ICE invierte 2.000 millones de dólares, valoración de 8.000 millones de dólares. ¿Cómo puede Polymarket tener este valor?

Fuente: Galaxy; Traducción: Jinse Caijing

La empresa matriz de la Bolsa de Nueva York, Intercontinental Exchange (ICE), anunció el martes que ha acordado invertir hasta 2,000 millones de dólares en Polymarket. Según datos de Messari, esta transacción es la séptima mayor inversión en acciones de una compañía de criptomonedas y la mayor inversión privada de una empresa tradicional de Wall Street. La transacción valora esta plataforma de mercado predictivo basada en blockchain en 8,000 millones de dólares. Esto casi multiplica por 7 la valoración de la última ronda de financiación de Polymarket en 2023, y es 22 veces mayor que la valoración antes de las elecciones de noviembre de 2024.

Además de esta inversión masiva, ICE también indicó que planea “convertirse en el distribuidor global de datos impulsados por eventos de Polymarket, proporcionando a los clientes indicadores de sentimiento relacionados con temas de mercado”. ICE afirmó que ambas compañías también colaborarán en proyectos de tokenización. Mientras tanto, el fundador y CEO de Polymarket, Shayne Coplan, insinuó que podrían estar preparando el lanzamiento del token POLY, y MetaMask anunció un plan para integrar Polymarket en su cartera (así como en operaciones de futuros perpetuos).

Opinión de Galaxy:

La inversión y el reconocimiento de instituciones emblemáticas de Wall Street forman parte del giro en el destino de Polymarket y su fundador de 27 años, Shayne Coplan.

Bloomberg calificó a Coplan como el multimillonario más joven del mundo hecho a sí mismo. Hace aproximadamente un año, en los últimos días del gobierno de Biden, el FBI allanó la residencia de Coplan para investigar si Polymarket permitía a usuarios estadounidenses acceder a la plataforma, lo que violaba un acuerdo de conciliación previo con la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC).

Sin embargo, durante la administración de Trump, el gobierno federal abandonó la investigación, y Polymarket adquirió la bolsa autorizada por la CFTC, QCX, allanando el camino para que volviera al mercado estadounidense. Coplan dejó de ser un paria, fue invitado a participar en mesas redondas en la Casa Blanca y en eventos conjuntos de la SEC y la CFTC. La compañía de Donald Trump Jr. participó en las primeras rondas de financiación, y él se unió a Polymarket como asesor.

Más allá de la impresionante valoración y el regreso de Coplan, nos preguntamos cómo planea ICE gestionar los datos de Polymarket. Esta información ya está publicada en la cadena, las probabilidades también se publican en el sitio web de Polymarket y (obviamente) se actualizan en tiempo real. Por otro lado, los servicios de datos de mercado son la principal línea de negocio de ICE, que el año pasado generó aproximadamente 1,84 mil millones de dólares, alrededor del 15% de los ingresos totales de la compañía.

Quizá ICE considere que puede empaquetar los datos de Polymarket en una forma que agregue valor a los clientes de TradFi, o quizás transmitir estos datos en tiempo real en las pantallas de negociación que ya utilizan estas instituciones. Si ese es el caso, y si ICE cobra por este servicio y comparte las ganancias con Polymarket, esto podría ayudar a resolver uno de los desafíos a largo plazo de esta última (que no cobra comisiones por transacción): encontrar un modelo de ingresos sostenible.

Desde una perspectiva macro, algunos podrían argumentar que el verdadero producto de las plataformas de mercado predictivo no son las apuestas en sí, sino las señales de información que generan estos mercados. Si la plataforma logra monetizar esas señales, puede imaginarse que puede obtener beneficios sin cobrar comisiones. Los mercados predictivos consolidan información dispersa en señales de precios. Cada precio de contrato puede interpretarse como la probabilidad implícita de un resultado. En muchos mercados, con el tiempo, esto crea un conjunto de datos de predicciones probabilísticas—básicamente, un modelo colectivo de expectativas en constante actualización. Desde un punto de vista económico, las apuestas son insumos, no resultados. Los resultados valiosos son la información generada por esas interacciones de apuestas. Desde esa perspectiva, no es difícil imaginar que la ventaja no mencionada de Polymarket radica en su potencial para capturar y estandarizar estos datos a gran escala, creando retroalimentación de alta frecuencia sobre el estado de ánimo y las predicciones del mundo real.

Las bolsas tradicionales monetizan la actividad de trading mediante tarifas, pero estas tarifas introducen fricciones que distorsionan la formación de precios. Los participantes ajustan sus precios de compra y venta según los costos, lo que significa que los precios del mercado se desvían ligeramente de las probabilidades “reales” colectivas. Si Polymarket logra encontrar una forma de monetizar la capa de datos, podría seguir evitando estas fricciones. Una estructura sin comisiones debería generar mercados más eficientes, y en consecuencia, productos de información más limpios y de mayor calidad. La mejora en la calidad de los datos se debe precisamente a que los usuarios no necesitan pagar para aportar datos.

Por lo tanto, podemos imaginar que la posición de Polymarket ya no es la de una plataforma de apuestas, sino la de un proveedor de infraestructura de información. El mercado es su mecanismo de predicción colaborativa; en este escenario, el negocio consiste en comercializar esas predicciones. Los clientes naturales de estos productos podrían incluir instituciones financieras, fondos de cobertura, medios de comunicación y desarrolladores de inteligencia artificial que buscan indicadores en tiempo real de eventos futuros del mercado.

Al mismo tiempo, la POLY token, según cómo esté diseñada, podría resolver otro gran desafío de Polymarket: mantener la confianza en su solución de contratos. Hace más de un año, el sitio de noticias tecnológicas The Information citó a fuentes anónimas diciendo que Polymarket estaba considerando emitir su propio token “para que los usuarios puedan verificar los resultados de eventos del mundo real”. Para quienes entienden la implicación, esto suena como una advertencia a la plataforma UMA, que Polymarket utiliza para resolver problemas de mercado y resolver disputas mediante votación comunitaria. Una queja común sobre UMA es que los grandes tenedores de su token podrían conspirar para resolver problemas de mercado de alguna manera que les permita beneficiarse independientemente del resultado real.

Este año, Polymarket ha tomado medidas para reducir su dependencia de UMA, utilizando Chainlink para abordar problemas relacionados con la volatilidad de precios de activos. Cuando anunciaron su colaboración, indicaron que “están explorando diversas formas de ampliar el uso de Chainlink, para resolver problemas de mercados predictivos que involucran cuestiones más subjetivas, reduciendo la dependencia de mecanismos de votación social y disminuyendo aún más los riesgos de resolución”. Por lo tanto, Polymarket quizás todavía esté considerando incluir POLY como parte de su solución.

Por último, nos interesa la posible colaboración entre ICE y Polymarket en la tokenización conjunta. Como señaló Coplan en una breve entrevista en el podcast TBPN, Polymarket tiene experiencia en esto: cada “sí” o “no” en la plataforma está vinculado a un token en blockchain que representa un resultado del mundo real. Por lo tanto, no sería difícil buscar su ayuda para tokenizar activos del mundo real listados en ICE.