El colapso del imperio de criptomonedas de Do Kwon ha llegado a un punto de inflexión, ya que el cofundador de Terraform Labs avanza hacia aceptar responsabilidad penal. Tras su extradición a Estados Unidos, Kwon ha indicado su intención de declararse culpable de cargos de conspiración y fraude electrónico derivados de la implosión catastrófica de 2022 de sus proyectos blockchain, según documentos judiciales revisados esta semana.
La magnitud del desastre
El desplome del ecosistema Terra borró aproximadamente $40 mil millones en valor para los inversores en semanas. El colapso se centró en dos activos digitales interconectados: la stablecoin algorítmica UST y su token complementario LUNA. Para la primavera de 2022, antes del colapso, LUNA había alcanzado una valoración de mercado de $50 mil millones, atrayendo a inversores minoristas e institucionales en todo el mundo. La desvinculación de UST de su $1 peg en mayo de 2022 desencadenó una espiral de muerte que destruyó las propuestas de valor de ambos proyectos.
Acusaciones y la estrategia cambiante
Inicialmente, el empresario surcoreano impugnó una acusación formal de nueve cargos que lo acusaban de fraude de valores, fraude electrónico, manipulación de commodities y conspiración para lavar dinero. Sin embargo, el equipo legal de Kwon ha señalado ahora la aceptación de dos cargos principales: conspiración para defraudar y fraude electrónico.
Los fiscales presentaron pruebas de que Kwon engañó sistemáticamente a los inversores sobre los mecanismos de estabilidad de UST. La engañifa principal consistió en afirmar falsamente que un algoritmo autónomo podía mantener el peg de la stablecoin, una ficción técnica, argumentaron los fiscales. Detrás de escena, Kwon supuestamente orquestó la conversión de fondos de luna en bitcoin y otros activos, mientras organizaba compras clandestinas de tokens UST y LUNA por millones para apoyar artificialmente los precios y mantener la confianza de los inversores.
Rendición de cuentas financiera
Las consecuencias legales ya están comenzando a materializarse. En 2024, la SEC obtuvo un acuerdo civil de $80 millones de dólares de Kwon, junto con restricciones estrictas: una prohibición total de transacciones y operaciones con criptomonedas. Este acuerdo representa un reconocimiento de la mala conducta a nivel regulatorio, incluso mientras los procedimientos penales avanzan.
La declaración de culpabilidad marca un avance importante en la aplicación de la ley en el ámbito de las criptomonedas, señalando que incluso los fundadores de alto perfil enfrentan responsabilidad cuando se les acusa de engañar a los inversores sobre las capacidades de la tecnología blockchain.
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La declaración de culpabilidad del fundador de Terra-Luna marca el fin de la saga de $40B criptomonedas
El colapso del imperio de criptomonedas de Do Kwon ha llegado a un punto de inflexión, ya que el cofundador de Terraform Labs avanza hacia aceptar responsabilidad penal. Tras su extradición a Estados Unidos, Kwon ha indicado su intención de declararse culpable de cargos de conspiración y fraude electrónico derivados de la implosión catastrófica de 2022 de sus proyectos blockchain, según documentos judiciales revisados esta semana.
La magnitud del desastre
El desplome del ecosistema Terra borró aproximadamente $40 mil millones en valor para los inversores en semanas. El colapso se centró en dos activos digitales interconectados: la stablecoin algorítmica UST y su token complementario LUNA. Para la primavera de 2022, antes del colapso, LUNA había alcanzado una valoración de mercado de $50 mil millones, atrayendo a inversores minoristas e institucionales en todo el mundo. La desvinculación de UST de su $1 peg en mayo de 2022 desencadenó una espiral de muerte que destruyó las propuestas de valor de ambos proyectos.
Acusaciones y la estrategia cambiante
Inicialmente, el empresario surcoreano impugnó una acusación formal de nueve cargos que lo acusaban de fraude de valores, fraude electrónico, manipulación de commodities y conspiración para lavar dinero. Sin embargo, el equipo legal de Kwon ha señalado ahora la aceptación de dos cargos principales: conspiración para defraudar y fraude electrónico.
Los fiscales presentaron pruebas de que Kwon engañó sistemáticamente a los inversores sobre los mecanismos de estabilidad de UST. La engañifa principal consistió en afirmar falsamente que un algoritmo autónomo podía mantener el peg de la stablecoin, una ficción técnica, argumentaron los fiscales. Detrás de escena, Kwon supuestamente orquestó la conversión de fondos de luna en bitcoin y otros activos, mientras organizaba compras clandestinas de tokens UST y LUNA por millones para apoyar artificialmente los precios y mantener la confianza de los inversores.
Rendición de cuentas financiera
Las consecuencias legales ya están comenzando a materializarse. En 2024, la SEC obtuvo un acuerdo civil de $80 millones de dólares de Kwon, junto con restricciones estrictas: una prohibición total de transacciones y operaciones con criptomonedas. Este acuerdo representa un reconocimiento de la mala conducta a nivel regulatorio, incluso mientras los procedimientos penales avanzan.
La declaración de culpabilidad marca un avance importante en la aplicación de la ley en el ámbito de las criptomonedas, señalando que incluso los fundadores de alto perfil enfrentan responsabilidad cuando se les acusa de engañar a los inversores sobre las capacidades de la tecnología blockchain.