Dos estudiantes de segundo año universitario, Avante Price y Eli Taylor-Lemire, comenzaron a construir Posh justo en su habitación de la residencia. Su visión era sencilla: crear una plataforma que hiciera que la escalabilidad de eventos fuera accesible para cualquiera. Para octubre de 2020, habían lanzado su primera versión. El impulso seguía creciendo y, para mayo de 2021, ambos fundadores decidieron comprometerse completamente. Abandonaron sus estudios y cerraron una ronda de financiación de 1,5 millones de dólares para acelerar el crecimiento. Lo que empezó como un proyecto paralelo se convirtió en una apuesta seria en el espacio de eventos, atrayendo la confianza de los inversores en su modelo y velocidad de ejecución.