Ayer por la tarde, ETH de repente formó una vela alcista que subió casi 300 puntos, en el grupo de trading todos reían y comentaban, pero un trader veterano silenciosamente cerró la app de mercado, abrió otra página y miró su parte de stablecoins, susurrando: "La obra todavía está empezando."

La tendencia matutina fue espectacular. La subida de tipos del Banco de Japón finalmente cayó, y el mercado representó una buena obra de "expectativa matando" — ETH cayó por debajo de 2775, más de 420,000 posiciones fueron liquidada en masa, y las posiciones de los minoristas se vendieron en oleadas.

Pero lo interesante es que los datos en la cadena cuentan otra historia. Las diez principales ballenas no movieron sus posiciones, incluso en el nivel de 2780, silenciosamente retiraron cerca de 80,000 ETH. ¿Eso es pánico de huida? Claramente, están abriendo bolsas esperando recibir más fichas.

Por la tarde, se publicó oficialmente el dato de aumento de tasas, y el guion de "máximo negativo" se desarrolló como se esperaba: ETH subió rápidamente a 2985 en tres horas, y muchos celebraron: "Los grandes están enviando beneficios, ya es hora de comer."

Pero la verdad no es tan simple.

La señal de peligro ya está aquí: el nivel de 2985 justo pisa sobre la posición de acumulación de 3030 que cayó anteriormente. Los minoristas que estaban cortando en la mañana, ¿ahora quieren comprar para recuperar? ¿Serán tan amables los grandes?

Y hay algo aún más doloroso: esta noche, con contratos de opciones por 23 mil millones de dólares por vencer, las opciones de compra y venta de Bitcoin y ETH se acumulan, poniendo a prueba la liquidez del mercado. En este momento, hacia dónde vaya el precio podría desencadenar una gran ola.

Así que, hay que pensar bien si vale la pena comprar en estos momentos.