La escasez de Bitcoin es la más fuerte, es el oro digital, y es adecuado para mantener su valor a largo plazo. La cantidad total de Bitcoin es de solo 21 millones, nunca se emitirán más, la dificultad de minería se reduce a la mitad cada 4 años, y ahora solo quedan 2 millones sin minar. Tiene una relación calidad-precio aún más fuerte que el oro. La minería de oro en todo el mundo tomará todavía varias décadas, pero Bitcoin se agotará completamente en unos 20 años si se sigue minando. Su lógica subyacente es contrarrestar la devaluación de la moneda fiduciaria, siendo el activo final en la impresión masiva global, y tanto instituciones como grandes inversores lo consideran como un ancla de reserva. La desventaja es que su función es simple, además de transferencias y almacenamiento de valor, no puede hacer mucho más. Pero solo por esta escasez, mantenerlo a largo plazo es tan seguro como un perro viejo.